La joven soprano Shereen Pimentel es Eva Perón en la versión que presenta Shakespeare Theatre Company en el Harman Hall de Washington DC. Foto: Producción NSSPRINT. Gentileza STC.
Desde su estreno en 1978 ya han pasado 45 años y “Evita”, la ópera rock con música de Andrew Lloyd Webber y letra de Tim Rice, sigue vigente. Tan vigente como Eva Perón. Y más allá de las opiniones políticas encontradas, la vida de esta mujer ha quedado en la historia como un emblema.
Una nueva versión de este musical con coproducción de Shakespeare Theatre Company y American Repertory Theater, se presenta en Washington DC desde el 5 de septiembre al 15 de octubre en el Harman Hall. Dirigida por Sammi Cannold, tiene como protagonista a una de las voces jóvenes más reconocidas de los últimos años, Shereen Pimentel.
La soprano, descendiente de puertorriqueños y jamaiquinos, creció en Nueva Jersey, y tuvo su debut en Broadway a los 9 años como la joven Nala en “El Rey León”. Un rol que soñó hacer desde pequeña, hasta que un día llegó la esperada noticia y el sueño, al igual que en las películas, se hizo realidad.
Cuando apenas tenía 3 años, sus padres la apuntaron en clases de baile pensando que el entusiasmo pasaría rápido. Pero un día, cuando decidió no ir al cumpleaños de una amiga porque le coincidía con su clase de danza, su madre se dio cuenta de que no se trataba de un hobby.
Después empezó en la Julliar School. Mientras estudiaba allí, protagonizó a María en la reposición de “West Side Story” en Broadway, y fue galardonada por su excelente interpretación con el premio del Círculo de Críticos a la mejor actriz de musical. Sus créditos en la pantalla incluyen “John Mulaney & the Sack Lunch Bunch” en Netflix.
Hace apenas unos meses Pimentel se convirtió en Eva Perón, un rol cubierto anteriormente por reconocidas cantantes hispanas como Paloma San Basilio y Elena Rogers. “Me siento honrada por ser la protagonista de este show icónico -afirmó Pimentel-. Eva y Argentina me obligan en cierta forma a buscar un punto medio. No quiero tomar partido. Es una pieza controversial, pero creo que incita a abrir la cabeza de la gente sobre la cultura y la política de otros países. Quiero que el público se quede con ganas de investigar, llegue a sus propias conclusiones y tenga su opinión personal sobre la historia, sobre el porqué de las decisiones que tomamos en la vida”.
La trama narra la historia de Eva Perón (1919-1952), una mujer que murió con toda la gloria a los 33 años, que se sobrepuso a la pobreza y al rechazo social para luego convertirse en primera dama y líder espiritual de la Argentina. Admirada por su encanto, su belleza y por su rol determinante en las causas sociales del país. No obstante, el musical ofrece una mirada crítica al personaje. Cuestionada en muchas oportunidades.
“Como no soy Argentina -comentó Pimentel- no tengo una visión completa de la historia del país. Por lo tanto, pensé en Eva Perón como persona. Me focalicé en las circunstancias de su vida y quiero ser lo más honesta posible. Esta versión examina más la parte humana del personaje. Mira los momentos personales”.
Shereen Pimentel -en “Evita”-, debutó en Broadway a los 9 años como Nala en “El Rey León”. Foto: Producción NSSPRINT. Gentileza STC.
Con dirección musical de Mona Seyed-Bolorforosh, escenografía de Jason Sherwood, vestuario de Alejo Vietti, iluminación de Bradley King y coreografía de Emily Maltby y Valeria Solomonoff, “Evita” convoca un elenco en el que se destacan varios talentos hispanos. El personaje de Magaldi lo interpreta Gabriel Burrafato; el Che, Omar López-Cepero y Perón, Caesar Samayoa.
“Evita” tuvo su estreno mundial el 21 de junio de 1978 en el Prince Edward Theatre del West End londinense, donde se representó con gran éxito hasta el 8 de febrero de 1986, con un total de 3.176 funciones. Y en la edición de 1978 de los premios Olivier (entonces conocidos como los Society of West End Theatre Awards), logró llevarse las distinciones al mejor musical nuevo y a la mejor intérprete (Elaine Paige).
Antes de su llegada a Broadway, se representó a modo de prueba en el Dorothy Chandler Pavilion de Los Ángeles y en el Orpheum Theatre de San Francisco. Hasta que finalmente el estreno oficial en Nueva York se hizo el 25 de septiembre de 1979 en el Broadway Theatre. Ese año recibió 11 nominaciones a los premios Tony y se quedó con siete estatuillas, algunas de ellas en los rubros principales. Un año después, Madrid fue el foco de atención del musical cantado en español, que tuvo un éxito sin precedentes y fue la consagración definitiva de la carrera de Paloma San Basilio.
En 1996 el musical llegó al cine bajo la dirección de Alan Parker, con Madonna, Antonio Banderas y Jonathan Pryce en los roles protagónicos. Su filmación, que se hizo, en parte en Buenos Aires, generó enormes controversias y rechazos.
“Lo que más me ha llamado la atención es la polarización extrema que generó el personaje de Eva Perón. Y también, la edad que tenía cuando todas esas cosas le pasaron. Era muy joven. De hecho, murió a los 33 años de cáncer. Es admirable cómo cuando llegó a ser presidenta la gente la apoyó de manera incondicional mientras otros la rechazaban absolutamente. Algunos piensan que fue una santa y otros no la aceptaban ni la aceptan hoy”.
Tal como sucedió en el ámbito político en el que siempre hubo peronistas y antiperonistas acérrimos, el musical, pese a las críticas demoledoras de los primeros años, fue un éxito de público. Y aun hoy “Evita” sigue siendo un musical insoslayable.
