El Ballet Nacional de Cuba (BNC), buque insignia de la danza académica de la Mayor de las Antillas, con Viengsay Valdés al timón como directora general y prima ballerina, “zarpó” el 22 de abril hacia su primera escala. El destino: el principal coliseo de San José, capital de Costa Rica. El propósito: ofrecer dos únicas presentaciones. Luego tomaron su rumbo hacia la península Ibérica para una más larga estancia, donde realizarán múltiples funciones en 14 ciudades importantes. Esta vez sin incluir Madrid y Barcelona. El 29 de abril en Terassa, en significativa celebración por el Día Internacional de la Danza, a las funciones aderezaron una muestra de imágenes del repertorio seleccionado para la gira logradas por un binomio de maestros de la lente: el español Josep Guindo y la cubana Yailín Alfaro (autores de varios libros sobre ballet).
Los públicos costarricenses estaban ansiosos de ver al BNC con un elenco mayoritariamente juvenil, puesto que retornaron a este país centroamericano después de 2001. Además, su relación se remonta a 1949, cuando sus fundadores Fernando y Alicia Alonso lograron viajar al exterior al año de su debut en octubre de 1948. Ahora en 2023, por sugerencia de los empresarios, disfrutaron de dos programas combinados que incluyeron fragmentos de dos obras canónicas: “Lago de los cisnes” y “Don Quijote”, y varias piezas contemporáneas de reciente creación, debidas a coreógrafos cubanos y foráneos.
Estos títulos mencionados también viajaron a España, pero con ciertos ajustes en los elencos, según explicó Valdés a la prensa, que permitirá un fogueo y visibilidad internacional de los jóvenes talentos afirmados y de otros en franco desarrollo, “porque es en la escena, sobre los escenarios extranjeros donde se confrontarán con diversos públicos, y podrán lograr la madurez y confianza artística necesaria”.
Algunos primeros bailarines experimentados y reconocidos serán reincidentes en ambas plazas, como es el caso de Anette Delgado y Dani Hernández, y la propia Valdés. Empero, el nuevo primer bailarín Yankiel Vázquez demostrará ampliamente sus talentos en el único solo del programa: “La muerte de un cisne”, del francés Michel Descombey.
Según Valdés, en esta ocasión, y dadas las dificultades en las programaciones de los teatros europeos, cerrados por mucho tiempo debido a la pandemia y a sus esfuerzos por la recuperación, se planteó esta primera gira por varias regiones próximas a Madrid, para preparar con gran empeño, una segunda en 2024 que incluya la capital española y la catalana, Barcelona.
“Así podrán admirar a nuestros bailarines, formados con la metodología de la “escuela cubana de ballet. Y a su vez, comprobar cómo otras academias de ballet de Latinoamérica la están adoptando, para alejarse paulatinamente de la enseñanza europea o rusa. Algunas ya están adoptando la cubana. Están revisitando las características fijadas por los Alonso, como la empatía o interrelación en el baile de pareja; la sensualidad natural en las féminas y la fuerza viril de los chicos”, apunto la bailarina y directora general del BNC.
Ha trascendido que actualmente se estudia un proyecto para el reconocimiento oficial de este legado cultural nacional, para declararlo Patrimonio cultural intangible de la nación. Al respecto, Valdés acotó que el BNC otorga todo su apoyo en el tema, para el rescate y protección del legado del maestro Fernando Alonso y de la escuela cubana de ballet. “Reclamamos que la decisión final llegue pronto, para que no sea contaminada o deformada con otros estilos y técnicas foráneas”, afirmó.
Como cierre de este diálogo franco e informal con la afamada artista, y teniendo en cuenta su designación como miembro del prestigioso jurado internacional que concederá de forma presencial el próximo junio, el Premio Benois de la danza 2023, organizado por el Teatro Bolshoi de Moscú, se le solicitó su opinión respecto de las sanciones aplicadas a notables artistas por no pronunciarse con respecto al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
Valdés fue rotunda en su respuesta: “Pienso que es insensato mezclar al arte con la política; lo que ocurre es una situación coyuntural y lamentable. No creo que estos notables artistas sean ‘castigados’ -al anular sus contratos- cuando han desarrollado una brillante carrera y han alcanzado un merecido reconocimiento mundial. Los valores que ellos defienden en buena lid en esta edición del Benois son los que el jurado internacional premiará”, concluyó.