La Compañía Flamenca Ecos subió a las tablas del decimonónico Teatro Martí, con una riesgosa y desgarradora versión coreográfica de la conocida pieza del dramaturgo español Federico García Lorca, “La casa de Bernarda Alba”. Concebida en un acto y trece escenas por su directora general y bailarina Ana Rosa Meneses, “¡Bernarda, No!”, cuenta un elenco femenino de fuste y un conjunto musical con cantaores de lujo en cualquier tablao andaluz de la Península.
En esta puesta del mundo lorquiano, las dinámicas del género flamenco se interrelacionan con los recursos expresivos de la danza contemporánea, mediante una estética definida por este conjunto cubano desde temporadas precedentes a las restricciones obligadas para controlar los contagios de la omnipresente pandemia de la Covid 19.
Esta nueva propuesta de la obra teatral más inquietante y cuestionadora de García Lorca, escrita en 1936, es un desafío asumido –tal un acto funambulesco en una cuerda floja circense-, por Meneses, en tanto que directora general y coreógrafa, con un elenco de bailarinas-actrices de convincente desempeño dramático, si bien hubo algunas sobre actuaciones. La coreógrafa intenta descodificar y desmontar a Lorca con la introducción de “vínculos particulares entre dos épocas y contextos diferentes”. (Con el eficaz empleo de “back projections” para apoyar estos fines).
Sus puntos de vista socioculturales y las experimentaciones creativas generacionales, la conducen al “no” del título de esta versión. “Es un ‘No’ permanente a todo lo que transgreda los derechos de la mujer, el ‘No’ a los prejuicios individuales y colectivos de las tantas Bernardas e hijas del ayer y de hoy”, apunta certeramente el especialista de artes escénicas, Carlos Velázquez, en las notas al programa de mano.
Después de 85 años de creado este contundente alegato escénico, en medio del franquismo más feroz, y de la partida física de su autor, se presenta un renovado discurso danzante -con respeto de los códigos del género- que conducen a transformaciones coreográficas coherentes en cuanto al tratamiento de sus personajes hasta llegar a “un diferente, desgarrador y poético final”. (Una gigantografía de la horca pendular se proyecta en el ciclorama blanco). La coreografía logra apropiarse de los conflictos del texto y comunicarlos; transitando por melodías y sentimientos del son, el bolero, la canción, la copla, el jazz, logrado en una síntesis brillante por el joven arreglista y productor musical Noel Gutiérrez.
Durante menos de 60 minutos, “Bernarda, No” se convierte en un hecho poético apoyado por los acentos puntuales del atractivo y eficaz soporte musical, los diseños escénicos minimalistas y las inteligentes intervenciones de las iluminaciones cuando eran necesarias.
Ecos y el flamenco
Dentro del panorama cubano de la música y la danza de raíz hispánica, la Compañía Flamenca Ecos, fundada en abril de 1999 por un grupo de bailarines y músicos, centra su labor en la producción artística, la enseñanza y promoción de este género. Esta agrupación está representada por el Centro de Danza, perteneciente al Consejo Nacional de las Artes Escénicas del Ministerio cubano de cultura.
Su reducido elenco artístico ha recibido clases magistrales de grandes figuras del flamenco, tales como Cristina Hoyos, Eva Yerbabuena, Israel Galván, Gerardo Núñez, ente otros. Ha realizado giras internacionales, desde 2012, por diversos continentes del planeta y obtenido numerosos reconocimientos con premios locales e internacionales.
Su fundadora
El inicio de la trayectoria profesional de Ana Rosa Meneses puede datarse en 1988, con una consistente formación, conseguida con la disciplina necesaria impartida, en sus inicios, por el rigor docente de instituciones locales, como la Sociedad Estudiantil Concepción Arenal, en la Escuela Vocacional del Gran Teatro de La Habana y en el Centro Andaluz de la Habana. Igualmente, cursa estudios de flamencología en 1990 con la profesora Lucía Canusso de Brasil en coordinación con el Centro de Promoción de la Danza (Pro-Danza).
Su desempeño profesional se inicia en 1991-1993, cuando forma parte de la Agrupación Danzas Ibéricas, dirigida entonces por Lizt Alfonso y luego fue al Centro Pro-Danza fundado por Laura Alonso, realizando actuaciones y giras por todo el país. Del 1994 al 1999, integra la compañía Ballet Español de Cuba donde interpretará todo su repertorio, así como algunos roles protagonistas en las obras “Carmen” y “La vida breve”. Con este conjunto nacional realiza giras internacionales a México y Colombia.
En 1999, junto con un grupo de artistas del género, funda Ecos, desempeñándose desde entones como directora artística, primera bailarina, coreógrafa, regisseur y profesora. Desde el año 2011 ocupa la posición de directora general de la compañía. En septiembre 2000 toma clases de perfeccionamiento de la técnica en Sevilla, con Ana María Bueno, asiste a diversos seminarios con cursos impartidos por celebridades del flamenco, como Eva Yerbabuena, Israel Galván, Mario Maya, Cristina Hoyos, Nuria Font, Antonio el Pipa, entre otros.
Participa en dos ediciones del Encuentro Intercontinental de Flamenco realizado en La Habana por María Juncal y Alfonso Losa, en 2017 y 2019. En octubre de 2019 realizó una gira por varias ciudades de Estados Unidos, y en su capital Washington DC además de compartir con artistas del género, impartió clases de flamenco enfocadas en el estilo “por guajiras”.